Representantes de los Gobiernos de una treintena de Estados, incluidos varios andinos, pidieron hoy más atención al impacto del clima en las montañas, en la I Conferencia Internacional de Países Montañosos sobre el Cambio Climático.
"Expresamos determinación de seguir un espíritu de cooperación para
integrar asuntos relativos a la montaña en la agenda del desarrollo",
expusieron en una declaración emitida al acabar la cumbre, que se ha
desarrollado durante dos días en Katmandú.
Los países participantes destacaron que se requieren "acciones
urgentes y en colaboración a todos los niveles", y abogaron por
"promover la investigación" y "el uso del conocimiento tradicional para
"encontrar soluciones a los desafíos del cambio climático".
La cumbre ha reunido a enviados de países latinoamericanos andinos
como Perú, Chile o Bolivia, y también asiáticos, africanos y europeos.
En la cita no ha participado España, aunque sí ha habido
representantes de varios Estados miembros de la Unión Europea y de
potencias como EEUU, China, India o Rusia.
Según los organizadores del evento, impulsado por el Gobierno de
Nepal, un país erigido sobre la cordillera del Himalaya, las montañas
representan el 24 % de la superficie de la Tierra y el 13 % de la
población.
El foro alegó que las conversaciones sobre el clima están más
centradas actualmente en la reducción de los gases de efecto invernadero
o en las potenciales amenazas que puedan sufrir las islas con la subida
del nivel del mar.
"Tradicionalmente, las montañas son vistas como atrasadas y pobres.
Son vistas como una zona para la actividad minera", expuso a Efe Dirk
Hoffman, del Instituto Boliviano de la Montaña.
La actividad minera está teniendo de hecho en Perú un impacto sobre
los ecosistemas, mantuvo Christian Devenish, del Consorcio para el
Desarrollo Sostenible de la Ecorregión Andina (CONDESAN).
Devenish explicó a Efe que "las minas abiertas eliminan la primera
capa del suelo", lo que impide que el agua se retenga" y fluya luego a
través de las vegas, donde es aprovechada para beber y regar.
El impacto del cambio climático en los países montañosos también se
aprecia en los glaciares, que decrecen, lo cual afecta a los suministros
de agua y la fauna, como en el caso de Chile, que tiene 22.000
kilómetros cuadrados de glaciares.
El indio Rajendra Pachauri, premio Nobel de la Paz en 2007 y
presidente del Panel Intergubernamental de Expertos sobre Cambio
Climático, opinó que el impacto del cambio climático en las montañas
"varía" y es "complejo".
Una postura similar mostró el viceministro peruano de Desarrollo
Estratégico de los Recursos Naturales, Gabriel Quijandria Acosta, quien
dijo a Efe que "hay una falta de conocimiento sobre cómo las montañas
están resultando afectadas".
Los participantes afirmaron que las montañas son "importantes" reguladores del clima y proveedores de agua.
Aportan el 50 % del agua dulce y de la biodiversidad, según datos
ofrecidos por David Molden, director del Centro Internacional para el
Desarrollo Integrado de la Montaña, una consultora con base en Katmandú
que ha dado apoyo técnico a la conferencia.
El frente de países montañosos espera poder hacer oír su voz en las
cumbres de la ONU de desarrollo sostenible Río+20, que se celebra el
próximo junio en Brasil, y la XVIII Conferencia de Cambio Climático de
Catar, prevista para finales de año.
"En la próxima reunión de Naciones Unidas queremos conseguir el
reconocimiento de que los ecosistemas frágiles requieren atención y
protección", dijo el jefe del Centro de Cambio Climático de Tayikistán,
Ilhojom Rajábov.
"Solo si estás unido por una causa común puedes tener un impacto en
un foro internacional", subrayó Festus Bagoora, responsable de la
Autoridad de Gestión del Medioambiente de Uganda.
No hay comentarios:
Publicar un comentario